ESQUEMA sobre LA RECONQUISTA Y LA REPOBLACIÓN

A partir de la conquista musulmana de la Península Ibérica (711-715) se configura en este territorio una situación novedosa, la aparición de una FRONTERA entre Al-Ándalus (nombre que recibe el territorio dominado por los musulmanes) y unas áreas que bien se resisten bien no son ocupadas por el invasor.
Si bien en un principio el dominio musulmán es casi completo, poco a poco estos territorios irán construyendo formas de dominio político (reinos, condados), ya sea de forma independiente (Reino de Asturias) o dependiente del poderoso vecino del norte de los Pirineos, el Imperio Carolingio, que articula la Marca Hispánica, de la que se irán desgajando sucesivamente Navarra, Aragón y Cataluña.
La hegemonía musulmana se mantiene durante casi trescientos años hasta que a principios del siglo XI el Califato de Córdoba se derrumba y de sus escombros surgen los más débiles Reinos de Taifas. Pero en ese momento los territorios cristianos norteños son ya mucho más poderosos, por lo que inician una imparable expansión hacia el sur (la denominada RECONQUISTA), acompañada por la instalación en esos nuevos territorios de población proveniente de sus lugares de origen (REPOBLACIÓN).
A mediados del siglo XIII sólo permanece bajo dominio musulmán el Reino Nazarí de Granada que subsistirá hasta que en 1492 sea conquistado por los Reyes Católicos. En el resto de la Península Ibérica han aparecido y se han consolidado otros cuatro reinos: Portugal, Castilla y León, Navarra y Aragón. Estamos ante la ESPAÑA DE LOS CINCO REINOS.